Dice un tópico, tan utilizado por vendedores de humo como falso, que toda crisis encierra una oportunidad. Y es que de acuerdo a éste, en el idioma chino esta palabra se formaría juntando los caracteres correspondientes a ‘peligro’ (危, wēi) y ‘oportunidad’ (机, jī) y, por tanto, toda crisis encierra una oportunidad.
Así, de acuerdo a esta filosofía de baratillo el que te vayan las cosas mal en tu trabajo o negocio no debería ser tan malo. Un vendedor de humo, pongamos un político o cualquiera de sus palmeros, te dirá que hay que reinventarse, que seguro que delante de ti tienes una estupenda oportunidad para emprender que no consigues ver debido a que tu estado de preocupación te lo impide.
Entre las numerosas actividades económicas afectadas por la presente crisis económica están las relacionadas con el sector inmobiliario. Felipe Núñez, vecino de Noia – provincia de La Coruña, España -, trabaja en este sector y últimamente dispone de más tiempo libre que antes. Tiempo que ha dedicado a una de sus aficiones, la elaboración de correas de reloj.
Parece que le va bien: esa afición se ha convertido en un trabajo a media jornada y está vendiendo sus correas de reloj en medio mundo.
Desconozco qué pensará acerca el señor Núñez acerca del prentendido significado ‘chino’ de la palabra crisis. En todo caso, desde este modesto blog mis felicitaciones por el éxito.
un relojista 
De una crisis ha surgido una oportunidad, lo cual siempre es algo interesante.
Me gustaMe gusta